Jáchal no se toca

Asamblea Jáchal no se toca

Silencios Cómplices

Ante el silencio del Arzobispo de San Juan Jorge Lozano, tal como sucedió con su antecesor el Arzobispo Alfonso Delgado, que no emitió ningún comunicado ante los tres derrames confirmados en la Mina Veladero (septiembre de 2015, septiembre de 2016 y marzo de 2017); desde la Asamblea Jáchal No Se Toca decidimos repudiar los dichos del Sacerdote Cámpora en el Diario El Chubut (edición 28/11/2020) por resultar falaces y por tratar de engañar al Pueblo de Chubut para que acepte la megaminería.

El sacerdote Rómulo Cámpora dijo: “Se va viendo un progreso que se sostiene tanto gracias a la gente que trabaja en comunidades como a las instituciones, incluyendo la Parroquia, que ha sido lugar de consulta y de mediación de conflictos, siempre en el camino de la honestidad. Creo que la minería es una posibilidad de progreso, pero siempre con respeto a las comunidades y con responsabilidad política. Sin avasallar. Siempre ha habido respeto a la comunidad.”

1° “Se va viendo un progreso” ¿Progreso? ¿Cuál progreso? En el departamento de Iglesia, donde trabaja de párroco Rómulo Cámpora, no hay ni una sola cama de terapia intensiva, ni un solo respirador, al igual que en el departamento de Jáchal, en donde Cámpora fue párroco en la época del primer derrame de la Mina Veladero. Los Hospitales son derivadores de enfermos, las ambulancias recorren muchas veces por semana los 160 kilómetros que nos separan de la ciudad de San Juan. No hay gas natural en Jáchal ni en Iglesia. No hay ninguna fuente de trabajo genuina y sustentable en ninguno de los dos departamentos. El Matadero Municipal de Jáchal tendría que haberse inaugurado en 2010, y todavía no funciona. La planta procesadora de pulpa de membrillo y fábrica de dulce de membrillo, se debió inaugurar en 2012 y todavía no se instaló ni una paila.
Es tal la desocupación que los municipios deben encubrir la con dos mil contratos basura de los municipios. Y hay otros 300 contratos en precarios del gobierno provincial en la zona. Ni hablar de la innumerable cantidad de veces que los pobladores iglesianos le cortaron la ruta a la mina Veladero para que les den algo de trabajo, porque hace 20 años se comieron el cuento que no existiría el desempleo en toda esta zona. ¿Progreso es que los clubes de fútbol se humillen pidiéndole a la Barrick Gold las camisetas o las zapatillas para los jugadores? ¿Progreso es que las uniones vecinales tengan que rogar durante meses a la Barrick Gold para que les done una bomba para los pozos de agua, que luego descuenta de las regalías mineras?
No hay ningún progreso cuando se juega con la dignidad de las personas para que acepten servilmente a la megaminería. La ausencia de políticas públicas sanitarias, laborales o hídricas ¿es progreso? Hace una semana que en las localidades jachalleras de Tamberías, Bella Vista y La Colonia no tienen una gota de agua en sus casas. Ir quedándose sin agua potable ¿eso es progreso?.

2° “a las instituciones, incluyendo la Parroquia, que ha sido lugar de consulta y de mediación de conflictos, siempre en el camino de la honestidad.” La Parroquia de San José de Jáchal en septiembre de 2015 y luego la Parroquia de Santo Domingo de Guzmán de Iglesia siempre trató de minimizar los conflictos de la sociedad con la Barrick Gold, como lo que intentó el Sacerdote Cámpora el 18 de septiembre de 2015 junto con el entonces gobernador José Luis Gioja. Ese día el gobernador le dio a Cámpora un informe que indicaba índices cero de contaminación del agua. No hubo nada de honestidad ni de Gioja ni de Cámpora. Eso se probó en el expediente judicial cuando la Barrick Gold debió presentar los análisis de agua en el punto de muestreo PAL 1 (a 120 km aguas abajo de la mina Veladero) en donde la contaminación con cianuro y mercurio tardó dos días en llegar a ese lugar. El derrame fue el 12 y 13 de septiembre de 2015, y el pico de contaminación llegó a la Junta de La Palca a las12:55 hs del día 15 de septiembre donde se detectaron 0,086 miligramos de cianuro total por litro de agua y 0,0012 miligramos de mercurio por litro de agua. Eso quiere decir que habían tergiversado los resultados y así quisieron engañarnos a los jachalleros, porque Cámpora fue el encargado de entregarnos en propia mano esos resultados “con cero contaminación del agua” el día 18 de septiembre. ¿A qué honestidad se refiere? Apañar las mentiras no es honestidad. Es ir en contra de la verdad. Ocultar la contaminación con mercurio no es honestidad. Es ir en contra de la vida de los niños de estas zonas.

3° “Creo que la minería es una posibilidad de progreso, pero siempre con respeto a las comunidades y con responsabilidad política. Sin avasallar. Siempre ha habido respeto a la comunidad.” Otra gran mentira de Cámpora. La mina Veladero no hizo ni siquiera las audiencias públicas antes de comenzar. No se respetó a la comunidad en 2003. Luego se generaron los derrames de cianuro y mercurio, que siempre el gobierno y Veladero ocultaron hasta que no les quedó otra opción que confirmarlos. No se respetó a la comunidad a partir de 2015. Se le negó dos veces a la comunidad de Jáchal la consulta popular por las fuentes de agua. Se avasalló a los jachalleros al no permitirnos decidir sobre nuestro futuro, sobre nuestra vida y la vida de nuestros niños. No se respetó a la comunidad en 2016 y 2018. El ocultamiento de la contaminación con mercurio de las fuentes de agua no es respetar a la comunidad. Es ir en contra de la salud y la vida de esa comunidad.

Parece que Rómulo Cámpora se ha descarriado, porque cuando habla de megaminería no defiende ni la verdad ni la vida. Es nefasto que mienta y más aún cuando lo que él defiende va en detrimento de la existencia de los pueblos y de la vida humana.

Felicitamos y agradecemos a los Obispos de la Provincia de Chubut (Monseñor Joaquín Gimeno Lahoz, Monseñor Alejandro Pablo Benna, Monseñor Roberto Álvarez, y Monseñor José Slaby), que han emitido una carta, con fecha de 27 de noviembre, dirigida al Gobernador Mariano Arcioni, donde dicen NO al proyecto minero que pretende ser instaurado en aquella provincia. Ellos clamaron por instancias de participación del Pueblo, y ante el atropello gubernamental decidieron decir NO, un NO activo y movilizado. Qué lejos estamos en San Juan de esas actitudes jugadas por el bien común, más aún hoy, cuando nos estamos quedando sin fuentes de agua por el calentamiento global y por la megaminería.
Con el Papa Francisco la defensa y el cuidado de la casa común ha dejado de ser algo accesorio para la Iglesia Católica, pero en San Juan parece que nadie se ha enterado, o son muy obsecuentes al gobierno de turno, o muy dependientes del poder feudal, o están muy cómodos con el status quo del poder hegemónico, o todo eso, y más.

Asamblea Jáchal No Se Toca

1° de diciembre de 2020