El fin de la grieta: La Megaminería Contaminante
Alberto Fernández visitó San Juan, y lo hizo en función de presidente pero en tono de campaña. Y ni siquiera sabiendo que está en plena campaña (y debe ser cuidadoso con lo que dice) pudo contener su respaldo a la megaminería,al igual que su antecesor Mauricio Macri.
Si, en las últimas décadas, cada presidente que visita San Juan hace lo mismo, ratifica como política de estado la megaminería, y eso no es casualidad, es el fin de la grieta.
El tema es que esa actividad está claramente mal vista en todo el mundo, y eso tampoco es casualidad, es producto del saqueo, contaminación y destrucción que provoca.
Pero no hay caso, los sucesivos gobernantes no lo ven, o no quieren verlo. Y tampoco quieren escuchar a quienes se lo quieren demostrar.
Es más, gritan a viva voz, como hizo Uñac en un tono cada vez más parecido al de Gioja, que esta tierra les abre los brazos para que vengan a instalarse. Y lo apoyan y consienten otros con la mirada y el discurso, como Fernández ayer. Incluso, de yapa, el presidente se hizo parte de la opereta montada por las megamineras para distraer a la población, con aquello de centrar la discusión en reclamos de derechos entre riojanos y sanjuaninos por la mina Josemaria, y con esa discusión tirar la pelota a otro campo, cuando en realidad lo que debiera discutirse es la naturaleza destructiva del proyecto y sus violaciones a la ley.
A eso no lo ve el presidente, a pesar de haber repetido la frase "dentro de la ley todo, fuera de la ley nada", frase más que hueca en San Juan, ya que la mina Veladero viola la ley de glaciares y la de Medio Ambiente, y no solo sigue trabajando, el ministro de producción la visita y sostiene que en Veladero se hace Patria.
El proyecto Josemaría mintió en su declaración de impacto ambiental al referirse al uso de agua, y también está en área glaciar y periglacial, eso también viola la ley.
Y eso tampoco lo ve, aunque se declare enamorado de la Constitución mientras ratifica esa "política de estado" que no es otra cosa que el segundo gran saqueo americano.
En otros lados si se ve, y la mayoría de los pueblos se han puesto de pié para impedirlo, incluso algunos gobiernos prohibieron tales actividades destructivas en plena conciencia de lo que significa la protección del territorio.
Agua, aire, suelo, gente.
Otra visita presidencial que en tono de barrickada señala al noroeste de San Juan como área de sacrificio.
Agua, aire, suelo, gente.
Algún día alguien parará esto y pedirá disculpas por el daño irreparable, seguiremos esperando, de la misma forma que esperamos que se haga justicia, con la verdad atada a nuestra lucha, cada vez más sedientos, y una enorme corporación enfrente.
Mientras tanto seguimos observando, azorados y dolidos, como los pasivos ambientales son de nosotros...los lingotes son ajenos.
Repudiamos
Repudiamos
Repudiamos
Jáchal No Se Toca